Vayan sintonizándose con los latidos de su corazón.
Vamos a profundizar, dentro de las enseñanzas que están escuchando, con lo que es un grupo. No hablamos de lo que los seres humanos viven como grupo, sino de lo que es.
Si damos por hecho que el hombre, consciente o no esta interrelacionado con el hombre y con todo lo que le rodea, lógicamente ya, en sí, forma un grupo de humanidad, grupos de animales, grupos de seres humanos, y todo debería hacerse en base a la necesidad del grupo, de la humanidad en este caso.
Pero yendo más allá, como todo debe ir en estos tiempos, no puede quedarse el hombre con su grupo de humanidad. Yendo mas allá, todo se relaciona de igual forma, los planetas crean su núcleo, su grupo, las galaxias, todo va formando pequeños o grandes grupos y en sí todos ellos se aúnan, todos ellos se interrelacionan para trabajar, para mejorar o para elevar en el momento necesario o requerido un punto específico, un punto que necesite ese apoyo de todo lo existente, de todos los grupos físicos o no físicos. Todo se relaciona en armonía y bajo esa gran ley grupal.
Pero parece que eso queda muy grande para la mente del hombre y tenemos que ir recogiéndonos, recogiéndonos, recogiéndonos hasta llegar a un núcleo o grupo que pueda el hombre ver, tratar y relacionarse de tú a tú. Y ahí es donde debemos comenzar, en los grupos, grupos de seres humanos pero con el conocimiento de que todo lo existente se relaciona de igual forma y que en un momento puntual, cuando se es requerida más energía, sólo hay que pedirla.
Y eso deben ampliarlo y ampliarlo y ampliarlo a cualquier situación o acontecimiento que esté viviendo la Tierra y, por tanto, los grupos. No importa el numero que forme el grupo, no hay un número determinado, de hecho, cuando dos seres se reúnen, energéticamente ya forman un grupo.
No importa el número de seres. Cada momento o situación necesita un determinado número de seres para que potencien esa energía y ocurra el hecho que necesita ese acontecimiento.
Cuando hay un acontecimiento que necesita de una energía mayor y el grupo es pequeño, siendo consciente este grupo de que la ley de los universos, la ley de la vida es esa, automáticamente requiere a esos seres que no son físicos, que no tienen cuerpo físico pero son seres. No hablamos de espíritus, hablamos de seres de otros espacios, seres con otra vibración que están en constante velo de la humanidad y de las humanidades que lo requieren.
En cuanto un acontecimiento necesite mayor energía de la que el grupo tenga, solo hay que pedirla y a veces, incluso sin pedirla, cuando el gran o pequeño grupo es consistente y trabaja en una vía bien dirigida, bien dada al servicio, esa energía es dada sin pedirla, regalada para que el hecho se concretice, y esa es la ley que rige todo lo viviente, o lo que es lo mismo, todo lo que existe, porque todo es vida.
En base a ese nuevo concepto de grupo no teórico en este momento, es donde entran en especial o en concreto cada uno de los seres que trabajan, o cada uno de los seres que su intención es estar al servicio de las necesidades del planeta, de los seres humanos. A esos seres se les habla y se les dirige para que sepan cómo abordar su vida, cómo mostrarse a partir de este conocimiento, cómo incorporarlo para que sus vidas vayan en esa dirección de servicio a la humanidad.
Y comenzamos por hacerles hincapié una y mil veces de formas distintas. Se les irá induciendo en principio para que se conozcan desde lo más profundo, para que sepan cuáles son sus verdaderas o auténticas necesidades. Después, para que lleven a cabo esas necesidades y no otras que las sociedades les quieran inculcar. Y así, de esa forma, cuando el hombre vive sus necesidades, cuando las lleva a cabo, es cuando se da cuenta y comienza a percibir que realmente no está solo, que hay fuerzas superiores que están velando porque cumpla con sus necesidades y las plasme para que con ello llegue a tener otras visiones que vayan más allá de la forma física y concreta del cuerpo y, por tanto, más allá de las necesidades físicas que tenga ese cuerpo.
Con ello queremos decir que una vez el hombre reconoce esas necesidades más profundas, íntimas o internas, es ayudado para mostrarlas y llevarlas a cabo y genera una confianza en sí de no estar solo, que sin necesidad de ver son sus ojos físicos ya percibe que hay otras existencias con la cuales él debe formar grupo.
Ya el grupo solidario humano lo debe elevar y saber que no sólo existe la vida que conoce y ve con sus ojos. Esa es la ilusión de la materia que ha conformado y solidificado formas que puede ver sus ojos, que puede acariciar su tacto, pero esa es la forma más grosera, más salvaje del ser humano, la que más le impide rozar esa forma sutil del espíritu en la que están viviendo y trabajando los seres que les dirigen, seres sin forma física, por tanto sin impedimentos concretos del cuerpo, de la mente, de los sentimientos, de las emociones, seres conscientes de todo lo que hacen y del por qué lo hacen, con la necesidad de unificar los mundos y a cada uno de los seres que habitan en esos distintos planos de existencia para que sean conscientes unos de los otros, aun teniendo el tiempo que cada cual necesite vivir en la existencia en la que esté.
Por ejemplo, el hombre está viviendo en el planeta Tierra con la densidad del planeta Tierra, con la necesidad de cambio del planeta, pero percibe o debe percibir que hay seres que están elevando esa conciencia o tasa de vibración para que quienes despierten mínimamente y se pongan en la frecuencia que los puedan sentir sepan que no están solos, que pueden hacer ese tránsito con la armonía necesaria para que todo permanezca en perfecto estado evolutivo.
Y debe de ser el hombre quien se acerque a esa frecuencia. Es lo único que en estos momentos se les pide a los seres que quieren estar o entrar al servicio de la humanidad, que una vez sentida, una vez aceptada la nueva visión del grupo, puedan trabajar hacia esa nueva forma de vivir para sutilizar un mínimo sus formas concretas y físicas, y sintonizar esa frecuencia y así poder percibir a todos los seres que trabajan con cada uno de ustedes.
En otras ocasiones se les ha explicado que al hombre -sea él consciente o no, quiera él o no- como raza se le está induciendo a través del sueño a un nuevo cambio de pensamiento y luego él despierta y no es consciente de nada, de nada, su vida la continua igual. De ahí que les decíamos: no se preocupen, no juzguen, vivan únicamente, vivan, porque a través del sueño se les induce a este nuevo estado necesario para estar en este planeta.
Ahora bien, también se les dice: aquel que busca al Gran Buscador, aquel que despertó a cómo hacer para ser consciente de que eso está ocurriendo y así posibilitar que conscientemente cada uno de ustedes se ponga al servicio a la par que estos servidores, eso sí depende de ustedes.
Se les está induciendo, a cada grupo de oración y no grupos de oración, pero sobre todo a cada grupo de oración, y se les están dando unas pautas por si hicieran vibrar algo en su interior que se pongan a trabajar con ese conocimiento o esos nuevos conceptos en cada uno de ustedes para sintonizar con otras frecuencias, con otros servidores. Y eso, repetimos, depende de cada uno de ustedes.
Si lo que escuchan les resuena en el interior, poco a poco observarán que necesitan hacer cambios, y poco a poco cada cual irá pidiendo esos cambios y se les darán, se les darán con armonía y se les inducirá para que piensen totalmente en consonancia con la vibración del planeta y las necesidades del momento.
Es así, tan sencillo y tan grandioso a la vez. Formar o entrar a formar parte de lo que cada cual sienta en la medida que lo sienta, en la medida que lo necesite y estar esas fuerzas espirituales, se podrían decir planetarias, se podría decir como ustedes quieran, pero son fuerzas que no dependen del propio hombre, fuerzas traídas de otros lugares puestas ya al servicio de esta humanidad.
Y el ser humano en su gran mayoría quiere permanecer dormido. Pues bien, pues bien, pero para aquel que quiera despertar ya sabe qué debe de hacer: debe de sentir que existen seres que están al servicio de la humanidad, de las humanidades, grupos de seres que están deseosos de unificar todo lo que existe para que el hombre, de una vez por todas, vea y sienta la gran obra que es, para que vea y sienta que en él no existe separatividad en nada, que está unido a todas las conciencias de cada uno de los seres que existen, que ya el sentir o pensar aisladamente lo único que lo va a llevar es a la desesperación, que debe de abrirse a esas necesidades que ya como raza humana siente, y es a la globalidad de lo existente, ser ese grano de arena pero consciente de que existen millones y millones y millones de granos mas, independientes pero a la vez con alma de grupo, con alma de un todo.
Y como decíamos al principio, parece que todo esto el hombre lo vea como lejano de él, como que no se lo acaba de creer. No lo vivan como un privilegio, no son seres privilegiados en ese aspecto. Como raza, como seres vivientes, como espíritus latentes forman parte de esa grandiosidad, no es que los han elegido, no es que esto es una elección para unos pocos, no, es la elección de vida para todo lo que palpita. Lo que sí es –lo crean o no- un gran privilegio, es estar despiertos, ser conscientes de ese tránsito, de lo que yo puedo aportar conscientemente, porque ahí no es que se duplique, es que no hay palabras para expresar lo que el ser siente cuando sabe que está sirviendo a la vida, no hay palabras para poder expresarlo.
Cada uno debe de ir a eso si es su necesidad, se repite, si es la necesidad. Por eso vayan reconociendo sus necesidades más intimas y se les irá dando en base a lo que cada uno necesite. Pero si ustedes no hacen el esfuerzo de reconocer cuáles son sus verdaderas necesidades no les van a poder aportar nada porque no se definen, no saben cuáles son y creen que sólo es aquello que ven. Y eso que ven, eso que ustedes tocan hoy con las manos se les está desmoronando. Lo que les pedimos es que se abran a estos niveles de consciencia que son los que no se van a desmoronar, los que les van a posibilitar estar, continuar estando.
En la medida en que en cada encuentro vayan ustedes abriéndose a la posibilidad de que el hombre está existiendo con otras existencias a la vez, en esa medida que lo haga suyo verá que no es tan importante esta vida concreta que ve hoy con los ojos, porque lo que ve hoy con los ojos mañana dejará de verlo, pero lo que siente en el alma, aquello que toca su espíritu, es lo eterno, lo que permanece y posibilita hoy que el cuerpo físico y concreto le acompañe.
En la medida en que cada uno de ustedes recoja este conocimiento como algo mas y no tenga la necesidad de ir más allá, observará poco a poco que si no lo eleva, si no lo agranda, si no se abre para ver todas esas nuevas posibilidades se sentirá desengañado, se sentirá falto de ánimo, en cuanto a grupos nos referimos. Y podrá buscar en otros grupos, podrá ir a otros lugares y podrá relacionarse con quien quiera, pero se sentirá de nuevo falto de algo que aun no sabrá darle nombre, porque es la nueva energía del planeta, la nueva necesidad del ser de humanidad, saber que convive con otros seres que no son extraterrestres y que no tiene que salir del planeta para convivir con ellos. Son seres que están, seres que estarán y que siempre han existido en los momentos puntuales de transición para un mundo, hoy en el nuestro, en el planeta Tierra, pero siempre allá donde sean requeridos, al igual que cada uno de ustedes si así es su necesidad.
Bienvenidos y que así sea.
1 comentario:
He pasado a leer la oración.
Gracias.
Me hace muy felíz saber que vosotros tambien creeis en los guías, gracias por reafirmar lo que yo siento dentro de mí.
Estoy aprendiendo muchas cosas, y esas cosas me hacen muy felíz.
Cada día siento menos dolor....
Y lo que siente mi interior, ya no espero que nadie lo entienda,
la única que tengo que sentirlo soy yo, y sólo yo, soy la que lo tengo que entender y comprender.
GRACIAS.
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