Muchas veces se ha hablado de que es importante que el ser humano recuerde, recuerde quien es, recuerde qué fue lo que en su inicio aceptó, decidió, pero pocas veces se ha escuchado que el recuerdo esté relacionado con la inmortalidad, entre otras cosas porque el ser humano ha confundido el término inmortal.
En esta ocasión vamos a desarrollar qué es la inmortalidad porque es necesario que el hombre reconozca la necesidad de querer ir hacia esa inmortalidad. Hasta hoy ha leído, ha escuchado, pero lo ha visto muy lejano, muy bonito pero muy lejano, muy inaccesible para él.
Como la mayoría de cosas novedosas que escuchan les agrada, creen que lo incorporan, pero no es real, no pueden incorporar aunque así les guste y quisieran si el hombre no recuerda o atisba mínimamente quien es, de ahí que en los últimos encuentros hacemos tanto hincapié y damos tanta importancia a que el hombre se conozca a sí mismo, sepa quién es, qué hace aquí y para qué está aquí. Eso sí va unido a la inmortalidad, eso sí va unido al recuerdo.
Hasta ahora el hombre cree que ser inmortal es conservar el cuerpo, cumplir y cumplir años con el mismo cuerpo. Háganse esta reflexión para poder comenzar a atisbar la inmortalidad de la cual hablamos, háganse esta reflexión: si la inmortalidad fuese conservar estos cuerpos actuales, ¿para qué serviría ese ser inmortal con sus mismas necesidades, puntos de vista, hechos, inquietudes, miedos?, ¿serviría de algo si fuese inmortal?, ¿para qué querría prolongar años y años un cuerpo como el de ahora?
¿Ven donde está la gran diferencia entre la inmortalidad que ustedes hablan o piensan y la que queremos que comprendan? No serviría de nada que el hombre conservara el cuerpo y fuese inmortal con las mismas necesidades de hoy. Si hoy el hombre no está contento, satisfecho, ¿para qué prolongar su estancia en el planeta? Si realmente todo lo que está ocurriendo actualmente es voluntad del hombre, es voluntad del hombre marcharse,-morir como él le llama- porque no ve otra salida, consciente o inconscientemente el hombre atenta contra sí mismo, contra la especie humana, porque no ve otra salida, por tanto ¿para qué prolongar esa angustia concediéndole lo que ustedes piensan que es la inmortalidad? Sería más que un don, sería lo que ustedes llaman venganza, porque si un ser humano es desgraciado, si no sabe qué hacer con su vida, dejémosle marchar, no prolonguemos su estancia en el planeta, dejémosle que se recicle. No es esa inmortalidad la que nosotros queremos que conozcan y apuesten por ella, hablamos de la inmortalidad como la cumbre máxima a la que el hombre consciente debe llegar.
Si el hombre es un ser de luz tiene que apostar a través de la fe que hablábamos el encuentro anterior, debe apostar a ir hacia ella, y para ir hacia esa luz tiene que recordar. Para poder recordar tiene que relajar esa mente activa pero a la vez sugestionada y obsesionada en un circulo sin salida. La mente del hombre está dando vueltas y vueltas a un mismo circulo donde inconscientemente, cuando llega al final de ese círculo, de ese punto de partida, está tan exhausto y a la vez tan vacío que entra en un desasosiego y en un sin sentido que le hace agredir a la misma raza humana, a sí mismo.
Ese movimiento, esa actividad que tiene la mente, es una actividad dañina para el hombre. Bien es cierto que el hombre debe ser activo puesto que la inercia no lleva a la vida, la vida es movimiento y actividad, pero siempre una actividad novedosa, una actividad que lleve al hombre a realizarse como ser de luz, una actividad creadora y creativa, no repetitiva, una actividad que lleva al hombre a sentirse satisfecho con él y con la vida, una actividad que no agrede ni a sí mismo ni a nada de lo que existe. Es entonces cuando el hombre recuerda que a través de ese estar, de ese comportamiento, tiene las muestras de que él es un ser de luz y el ser de luz automáticamente deja de ser dañino para la humanidad y para el universo y es cuando reconoce, se reconoce y es inmortal.
Cuando el hombre se reconoce inmortal ya da lo mismo que quiera vivir esa inmortalidad con el cuerpo físico o con otro, porque el recuerdo, la consciencia, la lleva consigo de uno al otro constantemente, para él ya no existe el olvido, ya relaciona lo que es, lo que existe, lo que existió y lo que existirá en uno, en él, y es cuando se siente Dios y creador, cuando es activo, productivo en este lugar y en otros, en este momento y en otros.
Esa es la automática inmortalidad, el ser consciente de lo que es, un ser dotado de todo lo necesario para prolongar y prolongarse dando vida, que todo su hacer, que toda su idea, todo él genere vida. La vida, lo que es la vida, no lo que ustedes llaman vida, nunca se repite igual, jamás, la vida va progresivamente cambiando y cambiando y cambiando hasta que llega a su máxima evolución y de ahí de nuevo se auto recicla.
La vida no es lo que el ser humano está viviendo, que repite una y mil veces los mismos patrones, eso es dar vueltas y vueltas a una misma forma de pensar, a una misma forma de actuar, y eso les lleva a corromper el espacio en el que habitan, véase sus cuerpos y todo lo que se relaciona con sus cuerpos, espacio, planeta y universo. De ahí que el hombre opta por dejar el cuerpo y mezclarse con esa bondad infinita para que sea ésta la que le recicle, se ve incapaz porque su pensamiento vuelve al mismo punto de partida, no ve salida, no recuerda quien es, no tiene intención de recordar quién es, le es mas cómodo dejarse llevar por esa decrepitud y marcharse.
Si amplían todo lo que están escuchando les será fácil llegar a la conclusión o a la deducción de que sus vidas tienen la necesidad de cambio. Son seres de humanidad que entraron por un punto en sus mentes y todo lo que les lleve al mismo punto de partida no les sirve, todo lo que les lleve al mismo punto de partida donde les va a llevar es a enfermar sus cuerpos y dejarlos, de ahí que venimos diciéndoles que recuerden todas las oraciones, todos los encuentros que han tenido, que estudien los puntos que les han ido explicando y observen sus vidas cómo han ido mejorando, observen si han dado a sus vidas otro enfoque, si ha habido ligeros, grandes o pequeños cambios.
Porque si una vez más les decimos que todo depende del hombre, que nadie le obliga, nadie, que todo depende de él, depende de él también que no enferme, y también depende de él que una vez enfermo sane, pero con una nueva visión de la vida, de su vida, una nueva visión de pensamiento, una nueva visión de actuar, una nueva forma de hacer. Si repite los mismos patrones se mueve dentro de la misma energía que ha generado, y esa energía esta descomponiéndose, está putrefacta, por tanto llega la enfermedad, física, psíquica, mental, emocional, enfermedad, y la enfermedad lleva a lo que ustedes llaman muerte.
Si es ahí porque lo ven más fácil, sean conscientes también de que son ustedes mismos quienes han optado por esa salida. No importa por qué salida opten, no importa, el camino y el fin van a ser el mismo, de lo que se trata es de que sean conscientes de quienes son para que ustedes, libremente como seres de luz, como dioses que son, opten por el camino que quieren, por la vía que quieren, ¿quieren realmente ser conscientes en todo momento de quién es ese ser de humanidad?: tienen que recordar, y para recordar -les repetimos- tienen que interiorizarse, aquietarse, que no significa pararse, nada está en paro, todo es actividad pero una actividad no repetitiva. El hombre está en plena actividad mental dentro de su obsesión por las formas que hoy conoce de vida y esas no sirven, están enfermas.
Si el hombre opta y decide ir a descubrirse como ser de luz hoy tiene todas las posibilidades a su alcance, todos los apoyos, todos, porque la Tierra así lo decidió, la Tierra así se ha dispuesto para que el hombre pueda ver, y la forma que tienen de distinguir qué han elegido es observar sus vidas, sus haceres, si se repiten, si sus pensamientos han hecho ligeros cambios pero al fin les llevan al mismo punto de partida recuerden que están girando dentro de esa peonza que no es vida. Tienen que ver, observar esos pensamientos donde les van a llevar a corto plazo, donde les va a llevar a corto plazo ese hacer, ¿a repetir los mismos patrones o realmente les dan nuevas posibilidades?, nuevas, aunque no sepan, pero nuevas, no les pueden dar nombre porque no las conocen, eso es lo novedoso.
Si ya de antemano con esos pequeños o quizás piensen que son grandes cambios, observan su vida y pueden determinar a donde les lleva, es que están girando dentro de ese círculo vicioso, y las muestras son tan sencillas de reconocer. El hombre debe de reconocerse, porque es todo muy sencillo, puede hacerlo todo lo complicado que quiera pero es muy sencillo, mi vida o la vida es muy sencilla, es poner los pies en la tierra y saber que aunque solo sea una idea es novedosa, y esa idea novedosa al instante se lleva a cabo, se le da forma, y así sucesivamente, eso es entrar dentro de esa inmortalidad, de ese recuerdo de ser de luz que tras una idea le surge otra, y tras otra idea le surge otra y así el mismo se va renovando, y así es como sale de esa rueda en la que está.
Todo lo complicado que el hombre ve es porque aun no se ha atrevido a moverse. Él cree que se mueve porque su mente está en actividad constante, pero observa qué has movido, observa, ¿si tienes 24 horas qué has hecho de novedoso hoy, de nuevo, qué has ofrecido a la humanidad, al planeta, a ti como ser de divinidad de nuevo? Has repetido lo de ayer, has repetido lo de la semana, el mes, el año y años pasados, ¿qué de nuevo has incorporado en tu vida, no en tu pensamiento, en tu vida?, ¿qué has llevado a cabo hoy? Háganselo pequeño, ¿qué has llevado a cabo hoy novedoso?
Así de sencillo es, no se pierdan en los pensamientos repetitivos, no se pierdan en la enfermedad. Recréense, recréense como seres de luz capaces de aportar algo nuevo a esta raza humana, a este planeta y a este universo. Apuesten de una vez por todas por lo que hoy se les ha explicado de la inmortalidad, quieran aferrarse a ella, quieran ser conscientes en cada instante de quienes son, elijan ustedes mismos qué hacer y háganlo.
Tienen todo el apoyo, todo, siempre se le ha dicho a la humanidad que no están solos, jamás el hombre ha estado solo, pero en este momento, a poco que ustedes despierten, a poco que salgan de esa inercia que les corrompe podrán ver, sentir, intuir que tienen miles de seres apoyándoles para que salgan de ese círculo vicioso, a la espera, a la espera de que ustedes se dejen guiar, a la espera de que ustedes rompan de una vez por todas ese círculo en el cual se han metido. Pero para ello tienen que dar muestras y las muestras son su hacer.
Así sea.
7 comentarios:
Cien por cien de acuerdo, pero es que yo soy tan egoista que queria a mi madre mucho mas tiempo conmigo y se fue, no murio, (murio) pero la muerte no existe si su alma vive, pero yo la quiero aqui y ahora
He pasado a leer vuestra oración, gracias.
amen,,,
abrazos,,,
Un abrazo y muchas bendiciones...
Grandioso tema.
Esta semana todos los dias detallitos te esperan en mi casita, llego el momento de compartir todo lo que tenía pendiente.
Feliz semana
bendicion a los presentes y a los ausentes que esten en con la luz
TE FELICITO POR TU ESCRITO Y POR TU BLOG, ES CIERTO LO QUE DICES, ME ALEGRA SABER QUE EXISTAN SERES DE DESENVOLVIMIENTO ESPIRITUAL, TE INVITO A QUE VEAS MI BLOG
www.maestrosespirituales.blogspot.com
En el encontraras tambien escritos similares y conocimientos de grandes seres que vivieron y viven una vida espiritual. saludos te enlazare a mi blog
Publicar un comentario