Foto: M.J.Moyano Hoy, fecha en que se celebra el Día Internacional de los Desaparecidos, deseo recordar a los desaparecidos presentes, esos que se encuentran entre nosotros en sus cuerpos pero cuyas almas andan lejos.
Todos los que se fueron porque les ignoramos, les menospreciamos, les hacemos sentir que no tienen ningún valor.
Esos desaparecidos cuya presencia visible no es la de ellos, pues hace tiempo renunciaron a ser ellos mismos para tratar de cumplir los deseos o las esperanzas de otros y acabaron por no recordar quienes son y a qué vinieron.
Aquellos que nunca escucharon lo preciosos y valiosos que son, y salieron a buscarse a sí mismos a través de un currículum, un status, un nivel de vida, un….. y nunca se encontraron.
Todos los que se vendieron y continúan vendiéndose porque creyeron la mentira que alguien les contó y no creen que son capaces de optar por lo mejor… y conseguirlo.
Aquellos que se conformaron con trabajar, comer, dormir y reproducirse.
Y a cualquiera que no está dispuesto a tomar las riendas de su vida, que prefiere seguir quejándose, lamentándose, justificándose, en vez de permitir que el espíritu que somos se manifieste con toda su grandeza y dé testimonio del sentido de su existencia.
La verdadera presencia no es la imagen hueca de una forma, sino la manifestación del contenido que la anima.
¡Ojala que esos desaparecidos, y los otros también -por supuesto- aparezcan de una vez!
1 comentario:
Existen cuatro clases de desaparecidos:
1)Los voluntarios
2)Los involuntarios
3)Los muertos vivientes
4)Los que nunca desaparecieron.
Algunos de ellos son desasparecidos voluntariamente, cuando su entrono ejerce tal presión e incomodidad que desaparecen para poder romper con todo... y empezar de nuevo en otro sitio distinto.
Otros desaparecieron involuntariamente porque alguien les secuestró, violó, estorsionó o asesinó... etc. El verdugo nunca se vió en el lugar del otro, ni le enseñaron que el otro es su mismo Yo, arrebatando a los demás sus derechos humanos sin saber ellos porque llegaron a ser así, nada mas se sabe que en sus frustaciones violentaron a los demas haciendo daño, sin ser jueces, juzgaron, sin serlo castigaron y sin ser verdugos ejecutaron.
Hay otra clase de desaparecidos que deambulan por nuestras calles, solo aprendieron la palabra MIO, para ellos DIos nunca existió, pisaron sus flores, arrancaron sus árboles, crearon guerras, no se inmutaron, nada les importó.
Pero hay una cuarta parte de desaparecidos.
¿QUIÉN HIZO ESTA SUPOSICIÓN?
Porque estos nunca desparecieron, solo para aquillos que no les querian ver, ni oir, ni sentir pero que desde siempre estuvieron AQUI Y AHORA jamás tuvieron la suerte de tener un grupo de oración como vosotros, pero día tras día en sus oraciones aman y sienten al Creador, solos, aislados, recogidos, nadie los contempla ni nada tienen que aparentar, ni nada son... exaustos en el YO, el Alma del Ser, desde la Tierra, desde el Cielo pleno, prendido en el Universo, colmado y sostenido en el Paraiso de Dios, aun no comprenden el porque de sus sentimientos ni porque fueron así dispuestos pero... así son.
No estamos desaparecidos... estamos, estamos en un canto continuo y diario en nuestro hacer, somos al igual que vosotros, amando y orando el mismo bendito Ser.
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